Este cuento se lo dedico a mi nieta Carolina.
EL TREN DE LA FELICIDAD
Amiguitos, ¿habeis visto alguna vez un tren sin vías, en marcha y por el cielo?...¿No?.., pues yo os voy a contar la historia de un tren que llevó la felicidad a un montón de personas.
Son tres historias distintas que os van a encantar, porque todas ellas reparten mucha felicidad.
La primera, trata sobre una pareja de ancianos que vivían en un pueblo pequeñito, y tenían un hijo al que no veían desde hacía mas de diez años.
Neizan, que así se llamaba el hijo, se marcho un día en busca de fortuna para que sus ancianos padres no pasaran mas penalidades, pero las cosas no le fueron bien, y no tenía valor para volver.
Un día, estaba sentado en la puerta de su casa y al levantar la cabeza ahí estaba...¡un duende con una gorra de maquinista de un tren!...y le dijo:
Coge tus cosas y ven conmigo.
Pero donde vamos, pregunto Neizan.
Y el duende respondió:
A que vivas la vida que tu buscabas con tus padres.
¿Pero como?...respondió Neizan....,estamos muy lejos.
Si, estamos muy lejos, pero ten fe, y cogiéndole del brazo le dijo:
Levanta la cabeza y mira hacia arriba.
Neizan miro hacia donde le decía el duende y vio un tren grande, muy grande, estaba estacionado en el cielo y hechando humo por su chimenea....¡sube, corre sube!..., lleno de alegría y sin creer los que le estaba pasando, Neizan subió.
Era como un sueño, estaba todo lleno de regalos y dinero suficiente para que pudiera vivir, sin preocupaciones, con sus ancianos padres.
Cerró los ojos y cuando ya estaban llegando los abrió...era fantástico, reía y lloraba de felicidad, y le dijo al duende:
Gracias, muchas gracias, no se que hubiera pasado si no llegas a aparecer en mi vida.
Esto te lo mereces, dijo el duende, no querías nada para ti, solo querías ayudar a tus padres y que fuesen felices, y eso es lo que te he conseguido.
Sus padres le vieron llegar, sorprendidos y llenos de alegría al ver a su hijo, nunca olvidarían aquel tren que les devolvió la felicidad. --------------------------
La segunda historia es sobre un orfanato que había en las afueras de una ciudad.
Este orfanato estaba a punto de cerrar, no había nadie que se quisiera hacer cargo de mantenerlo, ya no tenía casi dinero, y los mas de 20 niños que allí vivían, se iban a quedar en la calle.
La mayoría de estos niños habían tenido una vida muy dura, muchos de ellos nunca habían conocido a sus padres.
Lejos de esa ciudad vivía un matrimonio que disfrutaba de una vida muy cómoda pues tenían una gran fortuna, pero a pesar de todo no eran felices, les faltaba lo que mas habían deseado....tener hijos.
Un día, estando sentados en su jardín, se les apareció el duende del tren.
Asombrados le preguntaron:
¿Por donde has entrado?...¿quien eres?
Vengo a daros la oportunidad de ser felices.
Sii, ¿como?, respondieron.
Mirad, en cuestión de poco tiempo, ese tren que veis en el cielo os llevará a un orfanato, allí viven 20 niños que necesitan de vuestra ayuda.
Sin pensarlo arreglaron sus cosas y se pusieron en marcha, subieron al tren sabiendo que por fin iban a encontrar la felicidad que tanto buscaban.
Los niños recibieron una buena educación y fueron muy felices, y el matrimonio nunca olvidaría que un tren mágico les dio la felicidad con lo que ellos mas querían,... los niños. -------------------------------------
Y por último la tercera; cuenta la historia de un joven que estudiaba pintura.
Todos los lienzos que pintaba representaban lo mismo, sin saber por que siempre pintaba un paisaje con un volcán.
No lo entendía, pero sus manos siempre pintaban lo mismo.
Una noche tuvo una pesadilla y se despertó sobresaltado... ya no solo lo pintaba,...ahora también lo veía en sus sueños.
Viendo que eso no era normal, tuvo el presentimiento de que algo malo iba a pasar relacionado con un volcán.
Un día que se encontraba pintando uno de esos paisajes en la calle, se le acerco el duende maquinista del tren y le dijo:
Tus pinturas y tus sueños podrían ser reales, pueden ser el presagio de algo que va a suceder.
Hay un volcán que está a punto de entrar en erupción, y muy cerca hay una aldea donde viven una cuantas familias que están en peligro.
¡Mira!, dijo el duende mientras señalaba hacia el cielo... ¡¡Dios!!, un tren que vuela...exclamó el pintor.
Si, respondió el duende, y con ese tren salvaremos a todas las personas que viven cerca del volcán...¡vamos sube!
El tren se puso en marcha y cuando llegó a la aldea, el pintor avisó a los aldeanos del peligro que corrían y todos subieron al tren.
Cuando todos estaban a salvo, el volcán empezó a tirar fuego y lava, y todos daban gracias porque de no haber sido por el tren, no hubieran podido salvar la vida.
Bueno, pues estas eran las historias del Tren de la Felicidad; ¿os ha gustado?, espero que sí y como siempre os digo, colorin colorado, este cuento se ha acabado.